domingo, 5 de agosto de 2007
El Gran León
Pista de duela, sin más barniz que el aferrado en hilos. Ambiente nocturno a media luz. Sólo siluetas de acá para allá y los audaces tempraneros expuestos quedan bajo las mesas junto a la pista, la de duela.
El cortejo de sacar a una damita bailar se conserva en este sitio de la Roma, en especiales condiciones de temperatura, luz, humedad y, desde luego, la cantidad precisa de alcohol.
Caballo Negro es la canción preferida de todos los grupos que ahí tocan. Pero la bailas la cuarta vez como si fuera la primera.
Sólo en estas condiciones de ambiente se puede dar la presencia de un pachuco, pero de esos que nomás de verlos da gusto, dan ganas de arrastrar los pies por la pista.
Camisa naranja con flores, pantalón negro. joven él, no pasa de los 45, cabello con gel hacia atrás y una sonrisa y gusto por la vida que contagia.
Después de un plantón en Coyoacán, de haberme resignado a pasar la noche del viernes en un antro medio viejo en el que seguro a mi sister le hubiera encantado, lo hice.
Bailamos?
Con el peso de perder el ritmo al quedar cautivada por su sensualidad y sencillez, sólo me dejé llevar, dejé que con sus manos guiara mis manos desde sus hombres hasta sus caderas, pasando por su pecho. Dejé que me diera vueltas y vueltas, me sujetara de la cintura, me tomara como los hombres, de la mano.
Me guió a mi mesa y me dio las gracias con la promesa de volver a bailar esa noche. Y así fue.
El estilo sólo se desarrolla bajo especiales condiciones ambientales
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