¿La ciudad más grande del mundo?

¿La ciudad más grande del mundo?
Y llega la pregunta que en dos meses y medio no me habían hecho. ¿De qué parte de México eres?. Del DF.
¿La ciudad más grande del mundo? Sí, eso dicen los que saben la midieron y la compararon con todas las demás. No sé qué se imaginen ellos, pero seguro que saben que es mucho más grande que Madrid, más caótica y con más atascos en el tráfico que aquí.




Más grande que Madrid sí es, pero el transporte aquí es súper eficiente. Si bien la red del Metro de México es de gran cobertura, no cierra a la 1:30 de la mañana como el de Madrid, sólo una hora más temprano.

La red del metro de Madrid es de 283 kilómetros, 1.6 veces más la red de la Zona Metropolitana del Valle de México. Cuesta 10 veces más, un euro cada viaje. Pero el metro del DF transporta cinco veces más personas que el de Madrid, un total de mil 352 millones 408 mil 424 almas al año.

Eso explica que en México haya tantos atorones y viajes en modalidad del cachete con cachete, pechito con pechito. En Madrid, nada de eso. O que hay son carteristas y aguas con ellos porque son sigilosos y finos. Te quitan los calcetines sin sacarte los zapatos y aunque son captados por las cámaras, los vigilantes sólo se limitan a sacarlos de la red porque no hay quien presente denuncia.
El tren de Madrid va para atrás. Los vagones no llegan de izquierda a derecha al andén, sino al revés.

En los vagones se oyen voces. En la oscuridad del túnel un hombre anuncia: próxima estación. Gregorio Marañón. Correspondencia con Línea 10. Lo curioso es que las frases van alternadas con la voz del hombre y una mujer, que parece que están siempre en el vagón anunciando la próxima estación.

El transporte en Madrid en bus es muy bondadoso con la vida nocturna. Los viernes y sábados hay un transporte conocido como búho, que recorre de 12 a 6 de la mañana las principales rutas de Madrid. Todos sales de LA Cibeles, pero también pasan por las principales zonas de la típica marcha: Chueca, Tribunal y Malasaña, muy cerquita todas.

Con un bono mensual que cuesta 46 euros, unos 900 pesos, puedes viajar las veces que sean en bus o en metro dentro de la zona centro, ya en las afueras de Madrid, el bono es más caro por unos cuantos euros.

Si bien los autobuses son una belleza en cuanto a limpieza y orden, además muy nobles como transportes para las personas de la tercera edad, ya que cuentan con una suspensión que inclina el bus haciendo más bajo el costado que da a la banqueta y facilita el descenso.

Lo que no tienen es música original. Aquí no se escucha el pipipipíííííííí. Bootamboo tambooo tambooo, ni la Zeta, ni la Ke buena. Nada de eso. Son tan ordenados que respetan los semáforos, no les ocupa que lleves prisa porque conducen muy suave y parece que van en desfile, de modo que un trayecto que en micro te echas en 10 minutos, en un bus de la EMT de Madrid te toma 30. Por eso le he llamado turibús.

Tal vez extraño el caos, no tanto la contaminación porque aquí también hay. No extraño las marchas, ni los bloqueos, ni los embotellamientos. Extraño las cubetas de cerveza a precio de salario mínimo. Esas cosas que sólo hay en la ciudad más grande del mundo.